Noble, sano y natural, el vidrio saca su fuerza de la tierra. Este material es uno de los más antiguos, está ligado a la historia y a las técnicas culturales. Utilizado en la artesanía, la arquitectura y la conservación de alimentos, el vidrio tiene muchas aplicaciones.
Debido a su composición, el vidrio ofrece una conservación óptima y duradera, resistente al paso del tiempo, siendo un envase estable. Gracias a sus cualidades, el vidrio no interfiere con su contenido, es totalmente impermeable y conserva las cualidades y virtudes originales de los alimentos y bebidas. De esta manera, el vidrio conserva el sabor del producto y su transparencia aporta material para realzar estos contenidos.
Este material natural ofrece muchas posibilidades en el proceso de fabricación, tanto en su diseño como en su forma. Es posible mejorar su composición para que sea un vidrio más ligero, lo que permite minimizar el impacto ambiental, por ejemplo. También se le puede dar una multitud de formas y dimensiones, dándole forma de acuerdo a su imaginación y dejando que su creatividad se exprese.
El vidrio es un material ecológico por excelencia. Es 100% reciclable y se puede volver a fundir una y otra vez para hacer nuevas botellas de vidrio, sin alterar sus cualidades ni perder cantidad. El reciclaje del vidrio tiene un impacto positivo en el medio ambiente, aquí hay algunos ejemplos: